Ciclo de conferencias sobre aspectos inéditos de la cartografía española (Abril a Junio 2014) “La búsqueda del paso y los mapas”. Ponente: Mariano Cuesta Domingo.

El día 7 de abril de 2014  tuvo lugar la conferencia impartida por D. Mariano Cuesta Domingo “La búsqueda del paso y los mapas”

El conferenciante hizo descripción detallada y profusamente documentada con mapas y cartas de uno de los grandes problemas planteado a los conquistadores españoles tras el descubrimiento de América: encontrar el paso hacia el océano Pacífico con el fin de acceder por el oeste a las islas Molucas, Cipango, China y comerciar con el clavo, lacas, sedas etc.

Ya en las cartas griegas de Hiparco y Ptolomeo aparece la posibilidad de acceder al otro hemisferio del globo mediante dos caminos opuestos. Los portugueses habían iniciado la búsqueda de esta zona del mundo por el Este, cuando Gil Eanes superó el cabo Bojador sobre 1434. Castilla lo inició por el otro camino, el Oeste, pero sesenta años más tarde. La carta de Toscanelli muestra claramente que se accede a Cipango yendo hacia el Oeste, lo cual es cierto, pero, obviamente, en su carta  no aparece interpuesto el continente americano.

Los esfuerzos castellanos por encontrar “el paso” fueron extraordinarios y el profesor Cuesta nos expuso gran número de apreciaciones o intuiciones realizadas por los navegantes castellanos hasta que por fin se descubre en Panamá el gran Océano. Pero, una vez descubierto, la cuestión era como acceder a él.

Los navegantes conocían el  borde Oeste del nuevo continente pero ignoraban el borde este. Si navegaban hacia el Norte en Nueva España, volvían a arrumbar al este, de donde habían venido. Si lo hacían hacia el Sur recorriendo las costas caribeñas no encontraban  ningún paso.

Más al sur, el Orinoco era tan caudaloso que parecía impensable que semejante caudal de agua se originase en el interior de una isla. Brasil no podía tener naturaleza insular. Análoga consideración en el Rio de La Plata.

Los intentos de abrir un paso en Panamá fueron rápidamente rechazados por razones religiosas y científicas por lo que la búsqueda del paso debía continuar. Así lo mandaron los reyes españoles del mismo modo que en su momento hiciera Enrique el Navegante cuando Eanes no se atrevió a superar el cabo Bojador.

Por fin Magallanes en 1521 descubre el paso en la Patagonia. Su naturaleza era tan complicada y arriesgada que, aun en la actualidad, se requiere ayuda y, en todo caso realizarlo de día. Juan Sebastián de Elcano logra llegar a las Islas Molucas muy pocos años después de los portugueses. El paso había sido descubierto.

Como se ha dicho al inicio, el Profesor Cuesta expuso su conferencia apoyándose en un elevado número de interesantes cartas náuticas que clarificaron decisivamente los detalles de la aventura descubridora de “el paso”.