Ponente: Juan Ignacio Pinedo del Campo.
Día 24 de octubre de 2016.
Organizada por la Real Liga Naval Española y por la Real Asamblea Española de Capitanes de yate, Juan Ignacio Pinedo, impartió en la sede de la RLNE en Madrid, una conferencia sobre la expedición del explorador anglo-irlandés Ernest Shakelton quien a bordo del buque «Endurance» intentó en 1.914 una travesía en el océano Antártico, frustrada por el naufragio inesperado del buque. La supervivencia de los 27 náufragos que durante 20 meses soportaron toda clase de inclemencias en aquellas regiones desoladas en condiciones precarias, fue en gran parte debida a la capacidad de liderazgo y al valor personal el jefe de la expedición. Este hecho ha pasado a la historia como una de las grandes hazañas de las exploraciones polares.
El conferenciante comenzó explicando, apoyado por dispositivas, el contexto histórico en el que se llevó a cabo la expedición. Enumeró las exploraciones anteriores a la Shakelton en los dos océanos polares, como la de Ross. Franklin y Scott; centrándose después en la descripción y circunstancias personales y profesionales del protagonista. Nacido en Irlanda en 1874, se formó como marino en la marina mercante. Persona de espíritu inquieto y aventurero se enroló en el «Discovery» de la expedición de Scott en 1901, que tuvo que abandonar sin completarla, a causa de una enfermedad y acaso también por discrepancias de carácter con su jefe.
Formó parte más tarde de la «Expedición Imperial Trasatlántica» con gran éxito por lo que fue condecorado por el Rey. El 3 de agosto de 1.914, unos días antes de que estallara la I G.M., comenzó el viaje de exploración antártica a bordo del «Endurance». Antes de partir y consciente del inminente estado de guerra en que se iba a encontrar su país, ofreció al Primer Lord del Almirantazgo, W.Churchill, abandonar el proyecto de exploración polar para integrarse en la Royal Navy, petición que fue agradecida pero denegada. Después de navegar mas de mil millas por el Antártico, el buque quedó aprisionado por los hielos al llegar el invierno y no pudiendo soportar la enorme presión que estos ejercían sobre el casco, se abrieron varias vías de agua que produjeron su hundimiento. A partir de ese momento comienza la verdadera odisea del grupo de supervivientes. Tuvieron que arrastrar por el desierto helado un bote salvavidas y los enseres que pudieron rescatar antes del naufragio. Fue en esas circunstancias donde la fuerte personalidad de Shakelton impuso su liderazgo logrando mantener la moral de sus hombres, moderando desavenencias y algún conato de insubordinación. Al llegar a la isla Elefante. Shakelton tomo la decisión de navegar en el bote con algunos de sus compañeros para intentar alcanzar el archipiélago de las Georgias del Sur. Lo logró después de una penosísima navegación en un mar tempestuoso que estuvo a punto de acabar con sus vidas. En Punta Arenas la marina de Chile puso a su disposición el remolcador «Yecla» con el que llegaron a la isla donde había dejado a los náufragos.
El ponente explicó como el explorador había muerto de una crisis cardiaca, años después en el mismo archipiélago de Georgia del Sur, cuando encabezaba una nueva expedición antártica. En la actualidad allí se encuentra su tumba.
Entre los asistentes a la conferencia algunos, por circunstancias profesionales, habían navegado por las aguas de la malograda expedición de Shakelton, y pudieron aportar en el debate posterior detalles y anécdotas complementarias que dieron un interés añadido a la exposición del ponente.